El proceso de selección de personal se debe llevar a cabo de una manera minuciosa, ya que los colaboradores de tu empresa constituyen uno de los pilares fundamentales que permiten su correcto funcionamiento y el cumplimiento de los objetivos propuestos. Dentro de este proceso, en Colombia, se utilizan herramientas y métodos como las pruebas de polígrafo como uno de los factores que influyen en el proceso de contratación.
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Las pruebas de polígrafo son muy útiles a la hora de la elección de un personal estable, idóneo, capaz y altamente calificado, ya que las empresas no solo se basan en la primera impresión, también es importante verificar que lo expresado por el aspirante en su hoja de vida sea real.
¿Quieres conocer un poco más acerca de estos exámenes? A continuación, te damos algunos datos relevantes.
¿Qué son las pruebas de polígrafo?
Popularmente conocido como “el detector de mentiras”, la prueba de polígrafo es un estudio que evalúa, en teoría, cómo la mente se interrelaciona con el cuerpo. En esta evaluación se utiliza un instrumento científico para registrar los cambios neurofisiológicos de una persona, durante un protocolo de preguntas construido de manera específica y con la intención de verificar ciertas características del comportamiento o de la información aportada.
El polígrafo es un software especializado que consta de diferentes sensores que reciben y analizan las reacciones neurofisiológicas del evaluado a una serie de preguntas, y las registra de forma continua en un gráfico. Está compuesto por un neumógrafo, que mide el ritmo cardíaco y registra los movimientos del tórax; un esfigmomanómetro, que mide la presión sanguínea; un galvanómetro, con el cual se registra la conductancia de la piel (sudoración); y sensor de movimiento.
¿Cómo se usa el polígrafo para selección de personal?
Aunque no en todos los países se permite el uso de este artefacto en los procesos de selección de personal, en Colombia sí es permitido su uso, previo consentimiento y autorización por escrito de la persona a la que se le realizará la prueba.
Las pruebas de polígrafo por lo general tienen una duración media de 45 a 60 minutos aproximadamente y es un método muy utilizado y efectivo para certificar que la información que proveen los candidatos en sus HDV es correcta.
Para la aplicación de las pruebas de polígrafo existen estándares y normas de evaluación que deben seguirse para ser legales y válidas, por lo cual, estas deben ser realizadas por un experto.
Las preguntas que se realizan en las pruebas de polígrafo se deben revisar y analizar previamente con los candidatos. De esta manera, se asegura que los candidatos las entienden a la perfección y que, al momento de realizar las pruebas, no tengan nada que objetar ni añadir al respecto.
En los procesos de selección de personal, el polígrafo es utilizado como una prueba filtro que responde a los cambios del evaluado al momento de responder, con afirmaciones o negaciones, a los cuestionamientos hechos por el entrevistador.
Es importante aclarar que, para evitar afectar los resultados de la prueba y que no se altere el estado fisiológico de quien se somete a este examen, la persona debe hacerlo en condiciones estables de salud, haber dormido bien y no haber ingerido algún medicamento o sustancia psicoactiva.
¿Cómo benefician las pruebas de polígrafo a las empresas?
Las empresas con una fuerte competitividad o que desarrollan actividades sensibles, y requieren de personal altamente calificado y de un gran nivel de confianza para asumir cargos principales de alto desempeño, responsabilidad y compromiso, pueden optar por realizar este tipo de evaluaciones en sus procesos de selección y admisión, para encontrar al mejor talento humano.
¿En qué casos no se pueden aplicar las pruebas de polígrafo?
Sabiendo que, como tal, el polígrafo no detecta una mentira, sino que detecta cambios corporales que sufre una persona durante la aplicación de la prueba y que podrían indicar que está mintiendo, se debe considerar que esta prueba no es infalible y decisiva, y algunos expertos reconocen un acierto en sus resultados de entre el 80% y el 91%, siempre que se realice por personal idóneo y capacitado, y en las condiciones adecuadas.
Dicho esto, en Colombia no existe aún una ley que prohíba la utilización del polígrafo, sin embargo, el Ministerio del trabajo ha señalado que la prueba de polígrafo puede ser realizada en el ámbito laboral, únicamente por servicios de vigilancia y seguridad privada, siempre que no se utilice como prueba. Esto significa que puede ser aplicada en procesos de selección, vinculación o en ascensos de personal, pero no en procesos de desvinculación, o basándose en los resultados de la prueba para sancionar o despedir a un trabajador.
Lo anterior quiere decir que las pruebas de polígrafo solo se pueden implementar como mecanismo de control; en caso de detectar alguna irregularidad, el empleador debe comprobarlas con otros medios de prueba.
Conclusión
Hay muchas razones por las que se puede requerir la aplicación de pruebas de polígrafo en las empresas, sin embargo, las más comunes son las inherentes al proceso de selección de personal. Este examen permite que las empresas puedan incrementar la confianza que tienen en las hojas de vida o currículos de los candidatos, para así poder certificar y garantizar que desempeñarán su trabajo de acuerdo con sus capacidades.
De la misma forma, las pruebas de polígrafo son herramientas que en algunas ocasiones pueden ser utilizadas para detectar irregularidades dentro de la empresa o para la búsqueda de la mayor confiabilidad posible, pero no pueden ser decisivas en un proceso sancionatorio o de desvinculación laboral. La persona a la que se le realiza esta prueba, debe dar respuestas totalmente honestas y sin temor por los resultados, ya que esto puede influir en su proceso.
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